Érase
una vez un zombi que se llamaba Tom.
Un
día fue a una fiesta .El zombi mientras bailaba vio a un vampiro que
se llamaba Cazafantasmas.
Cazafantasmas
estaba muy triste porque no sabía bailar.
Entonces
le preguntó:
-
¿Qué te pasa?
Y
le contestó:
-
Que no sé bailar.
El
vampiro Tom le cogió de la mano y le enseñó a bailar.
Cuando
aprendió le dijo:
-
Gracias.
Le
contestó:
-
No hay de que, hombre.
Y
se hicieron muy amigos.
Pasaron
muchas aventuras. Fueron a Madrid para jugar en las atracciones.
También fueron a Barcelona, a París, a Italia y a Londres. Fueron
muy amigos.
MIGUEL
CANO MENÉNDEZ.
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